Bienvenidos.

Amigos:


Todavía no tengo muy claro a qué extraño impulso ha respondido mi necesidad de crear este blog.


Hace algunos años, me vi envuelta en una cruenta realidad de la que aún no he conseguido salir del todo. El destino me jugó una muy mala pasada colocando en mi camino a alguien muy extraño y retorcido. El resultado de ese grotesco azar, me trajo problemas muy graves a mi vida. Problemas que "la justicia" alimentó y fomentó, riéndose de mi, con su mayor descaro.


Es posible que este blog, responda unicamente a mi necesidad de liberarme de todo aquello. O quizás, también forme parte de esa transmisión del conocimiento necesario que los seres humanos precisamos para estar alerta y atentos a los engaños.


Bien es cierto que nunca se aprende en cabeza ajena!......Pero no es menos cierto que ante el descubrimiento de determinadas manipulaciones, podremos valorar con mayor realismo hasta que punto debemos creer en todo aquello que se nos cuenta.


Dentro de unas semanas, seguiré explicándoos mi odisea.


Un saludo!.............

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Extractos de "Las Cosas que no se Deben Callar". Reservados todos los Derechos de Autor-2007. Retazos de una vida. Basado en hechos reales. Algunos de los nombres de los personajes han sido cambiados para guardar su identidad.

viernes, 18 de enero de 2008

3- RECOPILANDO INFORMACIÓN.

Cuando recuerdo aquella mujer de 36 años……Llena de vida, positiva y vital. Valiente, generosa, pasional e impulsiva que, a pesar de su cortés osadía, siempre mantuvo su característica inocencia, la cual a muchos, les sorprendía. Pendiente siempre de los suyos; Su familia ante todo. Dedicada y cariñosa. Divertida y mordaz. Animando el alma de quién lo precisara, antes que ver el desánimo de quienes la rodeaban.
Coqueta y presumida…..Amiga de sus amigos, con quienes gustaba compartir tertulias livianas e intrascendentes que descargaran la mente después de la jornada laboral. Siempre con su amplia sonrisa de felicidad adornando su cara, aunque los problemas llamasen a la puerta. Trabajadora e independiente. Dueña de su propio negocio, que desde hacía dos años, sacaba a delante con sacrificio e ilusión ayudada por su entrañable familia y aplicando muchas horas de dedicación, como cualquier negocio que empieza"......
……Recuerdo la alegría con la que me despertaba cada mañana al sonar la emisora de música clásica en mi despertador……
Al abrir los ojos, lo primero que veía era, una húmeda naricita negra olisqueando mi cara. Tras la nariz, dos grandes y redondos ojos de un marrón intenso, que me miraban con cara de:.....¡Hola colega!.....¿Nos vamos a la calle?.....

Eran los “buenos días” de mi querido coleguita peludo de cuatro patas. El es un beagle precioso, gordito y rechoncho, como los de su raza. Tozudo, independiente y a “su rollo”, como todo perro de caza. Llevábamos juntos casi seis años, compartiendo buenos ratos. ¡Aquellos si que eran días felices!.......

El y yo bajábamos cada mañana caminando desde casa a la tienda, disfrutando del sol a paso ligero y enérgico……¡Un, dos!.....¡Un, dos!….¡Un, dos! Hacíamos de nuestro ejercicio, un placer. El coche lo dejábamos para los domingos. Día este dedicado, al “paseo montañés”.
Su cariño incondicional y su permanente compañía, delataban en mi amigo, esa fé ciega que nunca dejó de depositar en mí. Nunca nos habíamos separado y sin saberlo, él siempre me dio todo su apoyo y su ánimo, con sus juegos, arrumacos y atenciones.

.....Cada día a las 10.30, la tienda estaba abierta. Los tenderos de la calle, solían decir cuando nos veían llegar:…..- ¡Ahí está la alegría de la calle!.
¡Siempre feliz! ¡Siempre contenta por lo maravilloso que es vivir!. Atrás quedaban los malos ratos que en mi juventud, había conocido.
Por desgracia o por suerte, a mis 36 años, ya cargaba a mis espaldas unos cuantos fracasos de importancia y llevaba la mochila bien repleta de desengaños amorosos.

Mientras yo no tenía ni idea de quién era mi nuevo amigo, él se había informado sobre "quién era yo" y "cómo y de qué vivía" a través de mis colegas. Ignorante de ello, seguí feliz mi vida, tratándolo como un nuevo y fiable conocido del barrio.

RDA/2007-Las Cosas que no se Deben Callar.