Bienvenidos.

Amigos:


Todavía no tengo muy claro a qué extraño impulso ha respondido mi necesidad de crear este blog.


Hace algunos años, me vi envuelta en una cruenta realidad de la que aún no he conseguido salir del todo. El destino me jugó una muy mala pasada colocando en mi camino a alguien muy extraño y retorcido. El resultado de ese grotesco azar, me trajo problemas muy graves a mi vida. Problemas que "la justicia" alimentó y fomentó, riéndose de mi, con su mayor descaro.


Es posible que este blog, responda unicamente a mi necesidad de liberarme de todo aquello. O quizás, también forme parte de esa transmisión del conocimiento necesario que los seres humanos precisamos para estar alerta y atentos a los engaños.


Bien es cierto que nunca se aprende en cabeza ajena!......Pero no es menos cierto que ante el descubrimiento de determinadas manipulaciones, podremos valorar con mayor realismo hasta que punto debemos creer en todo aquello que se nos cuenta.


Dentro de unas semanas, seguiré explicándoos mi odisea.


Un saludo!.............

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Extractos de "Las Cosas que no se Deben Callar". Reservados todos los Derechos de Autor-2007. Retazos de una vida. Basado en hechos reales. Algunos de los nombres de los personajes han sido cambiados para guardar su identidad.

lunes, 16 de junio de 2008

22- REFLEXIONANDO TRAS EL SUSTO.

Con aquellos pliegos de papel frente a mí y lo que me había contado, creí darme cuenta de lo complicado que es conocer a algunas personas. Hasta aquel momento, la ciega confianza depositada en quién había considerado el posible hombre de mi vida y lo que él me había querido mostrar de si mismo, había propiciado que durante los anteriores meses viviera en una nube de agradable color rosa pero, después del mes vivido y de lo acabado de escuchar, me planteaba si, quizás yo, había crecido en un mundo irreal. Quedaba claro que hasta entonces, simplemente fui una feliz “señorita” que siempre había vivido en un maravilloso “mundo de hadas”.

....Durante unos instantes repasé mi vida y mis gratos recuerdos de infancia y adolescencia. Visualicé a mi familia y a mis amigos…..Recordé a los que ya no estaban junto a mí....Y me di cuenta de cuanta generosidad había recibido en mi vida y lo poco que hasta entonces la había valorado por creerlo normal. Entonces vi con claridad, lo mucho que vale crecer en un ambiente de sosiego, amor, sinceridad y respeto. También recordé las caras de aquellos clientes y conocidos, que habían pasado frente a mí con sus complicadas y desorganizadas vidas y con los que en su día, me solidaricé, aunque en el fondo, la necesidad de blindarme ante su sufrimiento, me hiciera huir de ellos para que sus problemas no me salpicaran. Seguramente hubiese tenido que actuar así y no de otra forma con Aldo pero, no lo hice. Preferí integrarlo en mi vida y entre los buenos deseos de quienes siempre me habían respetado al entender que, me quería de una forma “blanca” a pesar de sus problemas…..al igual que los demás.
El destino tiene bromas muy pesadas y la casualidad había querido implicarme en una historia realmente extraña, en la que yo no tenía claro ni que hacía ahí, ni como seguir. Ni tan siquiera…..¡Cómo salir de ella! Lo único que sabía en esos días era que, esa relación no se parecía en nada a lo que yo había imaginado ni a cuanto había conocido. Realmente me sentía perdida y sin saber cómo manejarla.
La gente relacionada con el mundo esotérico, hablamos habitualmente del “Karma” que arrastramos de “otras vidas”. Y en aquel momento, yo estaba convencida de que la relación que vivía, no era casual si no que con toda certeza, había llegado a mi vida para seguir completando mi aprendizaje en este mundo y por tanto, no debía huir de ello. La obligación era afrontarlo, crecer y superarlo. De lo contrario, con toda seguridad, al pasar de los años volvería a encontrarme con una situación igual o similar, aunque los personajes hubiesen cambiado. Quizás era más conveniente afrontarla y no “darle esquinazo”. Pero…..¿Cómo hacerlo?......

RDA/2007-Las Cosas que no se Deben Callar.

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